En diálogo con el programa En Ojotas, Silvia Pérez, la taxista que ofrece un servicio diferenciado para niños, mujeres y adultos mayores, contó que la idea surgió por la situación económica a causa de pandemia. Este novedoso serviciose le ocurrió a su hija y nunca imaginó que tuviera tanta repercusión.
Silvia es chófer de taxi desde hace 7 años y comenzó por un accidente que tuvo su madre, que también era taxista, y que, para que no perdiera sus clientes y clientas, se subió al auto. Antes, ella era ama de casa.
La taxista planteó que quieren tener una parada fija de mujeres pero tránsito y transporte todavía no les comunica si es posible, porque tendrían problemas con los compañeros varones.
Además, comentó que sus clientas se sienten más seguras al ser un mujer quien conduce el taxi.